El legislador colorado Martín Arévalo se defendió ayer en conferencia de prensa ante las acusaciones de tráfico de influencia por parte del director Aduanas, Julio Fernández.
Fernández acusó a Arévalo por presunto tráfico de influencias, mostrando como pruebas capturas de pantalla en donde el congresista pedía la designación de dos funcionarios en altos cargos. Además, lo denunció ante la fiscalía por su supuesta intromisión en una incautación de mercaderías, solicitando que las devuelvan a su dueño.
En su defensa, Arévalo acusó a Fernández de haber solicitado bonificaciones para funcionarios de Aduanas en plena pandemia. El legislador también presentó como pruebas audios y capturas de pantalla de WhatsApp que evidencian el supuesto pedido del titular de Aduanas.
Sobre la solicitud de promoción de los funcionarios identificados como Luis Pereira y Miguel Medina en altos cargos, Arévalo evadió la consulta y dijo que las supuestas pruebas pudieron ser montadas.
En cuanto al pedido de devolver la carga de mercaderías de unos 3 millones de USD al ciudadano árabe de nombre Ahmad Khalil Chams, el congresista aseguró que la incautación se realizó de forma totalmente irregular, ya que las mismas fueron posteriormente robadas casi en su totalidad en un asalto tipo comando.
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