Cinco hábitos para aumentar la inteligencia que puedes comenzar ya

Los mejores trucos que puedes utilizar para aumentar tu inteligencia.

Antes de hablar sobre «hábitos para aumentar la inteligencia», tenemos que responder realmente qué es la inteligencia. Todos parecen tener una definición, y existen varias según los científicos, pero en general se refieren a la capacidad de abstracción, lógica, aprendizaje, entendimiento, conocimiento emocional, creatividad, pensamiento crítico y solución de problemas que tiene una persona.

Si lo vemos de esa forma, ¿qué tan inteligente crees que eres? Otra definición se refiere a la habilidad de percibir y procesar información, retenerlo como conocimiento y aplicarlo a comportamientos de adaptación dentro de un contexto o ambiente. Desde esa perspectiva, podemos definir algunos hábitos para aumentar la inteligencia. Serían aquellos que nos ayuden a desarrollar más esa habilidad, y aunque no suene tan complejo como lo primero, realmente nos pueden ayudar a esas otras áreas.

Aprende constantemente

«Si estás invirtiendo en tu educación y estás aprendiendo, deberías hacerlo lo más pronto posible porque tendrá la capacidad de acumularse por más tiempo. Y las cosas que aprendes e inviertas debería ser conocimiento acumulativo, para que el conocimiento se construya sobre si mismo». Esto mencionó el genio de la inversión Warren Buffett quien señala que la mejor inversión que se puede hacer es en el desarrollo de aprendizaje.

Si te pones a pensarlo, es posible aprender cualquier cosa, el mundo está lleno de posibilidades lejos de nuestro conocimiento y habilidades. Ahora vivimos en la era del Internet lo que hace el acceso a la información más sencillo e incluso puedes aprender cosas sin costo.

Por supuesto, es más recomendable buscar talleres, cursos o más para así poder conocer más personas y que esas ayuden a incrementar tu conocimiento.

Leer

Leer es una forma clave para aprender, incluso cuando hablamos de ficción ya que nos puede ayudar a ver ciertas cosas desde otra perspectiva, o a aprender de otras culturas a través de los autores. Sin embargo, es importante considerar que leer per sé no asegura un aprendizaje ya que, así como hay TV basura que no ofrece demasiado y TV de calidad de la que podemos rescatar diversas cosas, lo mismo sucede con los libros.

Desarrollar empatía

La empatía es un elemento clave de la inteligencia emocional, pero también nos puede ayudar a aprender y reaccionar mejor en ciertas situaciones. Las personas que no tienen empatía suelen ser cerradas y no suelen pensar en las consecuencias que tienen sus acciones en otras personas.

La empatía nos permite pensar y ver ciertas situaciones desde diversos puntos de vista, lo que ayuda a entender cómo se sienten otras personas. Al escuchar a las personas, y observar su comportamiento podemos aprender más y mejorar nuestras relaciones y aplicarlo de diversas formas en nuestra vida diaria.

Escucha diferentes puntos de vista

Como mencionamos en el punto anterior, escuchar diferentes puntos de vista puede ayudarte a ser más inteligente, y ver las cosas desde otra perspectiva. Esta es una habilidad que muchos han perdido todos los días como se ve en redes sociales, las cuales se convierten en cámaras de eco en la que sólo se recibe afirmación sobre la ideología personal. Debemos salir de esas burbujas y escuchar otras perspectivas, desarrollar empatía y así desarrollar una capacidad de ver un problema con sus posibles soluciones.

Una mente cerrada es señal de alguien que no está dispuesto a aprender más y que se siente cómodo con su visión del mundo. Una persona inteligente nunca deja de aprender.

Encuentra formas de retarte

Todos nos sentimos cómodos en nuestra zona de confort y podemos ponernos nerviosos cuando se trata de aprender algo nuevo o desarrollar una habilidad. No recordamos que todos aprendemos de forma lenta y que se necesita tiempo, lo que lleva a que muchos renuncien antes de comprometerse a intentar algo nuevo.

Es importante buscar siempre formas de retarse, y puedes intentarlo de varias formas. Desde hacer rompecabezas, resolver acertijos o crucigramas hasta aprender una nueva habilidad desde cero.

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