San Lorenzo perdió mal ante Fernando de la Mora en su primer encuentro de la segunda ronda y más allá del resultado, que lo deja nuevamente afuera de la pelea por el ascenso, la actuación del equipo fue muy pobre, contrastando radicalmente a lo mostrado en las últimas presentaciones, cuando el equipo fue la base con la que se viene jugando.
Lejos de ser un equipo ordenado, efectivo, con carácter, con variantes y yendo al frente, el Rayadito de José Domingo Salcedo tuvo un traspié casi inesperado frente a Fernando, quien está en alza.
Si bien al rival le costó llegar a dar el golpe final, porque San Lorenzo la estaba sacando barata con el empate, la superioridad era muy notoria, por la poca seguridad que había en defensa, por las escasas pelotas que le llegaban a los delanteros y por lo impreciso que estaba el medio.
La derrota se da de manera sorpresiva, no porque el rival sea incapaz de tumbar a San Lorenzo, quien claramente no es invencible para nadie en el torneo. Más bien por lo optimizado que venía el cuadro de Salcedo, por la practicidad con la que venía ganando sus partidos y porque de local ya no se encontraba con dificultades. Entonces ganar hubiera sido lo ideal para encarar los dos próximos encuentros que tranquilamente son perdibles, ya que hay que ir a jugar a la Chacarita frente a Resistencia, para luego ser local ante Independiente.
De todos modos, claro que nada está perdido. El Rayadito está a solo tres unidades del escolta que ahora es Atyrá. Está todo muy apretado, por esa razón la regularidad, sobre todo como local, es determinante en esta decisiva etapa del campeonato, que ya prácticamente lo tiene a General Caballero de Juan León Mallorquín como dueño absoluto de uno de los tres cupos directos a Primera División.
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