¿Tienes un felino en casa? Tal vez notaste la reacción de tu mascota ante un olor fuerte, esto se debe a que hay ciertos olores que odian los gatos.
¿Existen olores que odian los gatos? Sí, los felinos son la representación animal de la limpieza. Estas reglas natas en ellos aplican también a su entorno y todo lo que tiene que ver con él. Tal es el caso de los olores, un tema interesante dentro del mundo de los gatos. Debido a procesos evolutivos, estos animales tienen preferencias olfativas.
Así como existen olores que les gusta tanto, también hay otros que, sencillamente, no soportan. Ya se trate de alimentos que no pueden digerir, olores naturales fuertes o productos químicos potencialmente peligrosos, un gato evitará ciertos olores y huirá de ellos. Por ello, a continuación, te mencionamos algunos de estos para que tengas en cuenta si tienen una mascota en casa. ¡Tomá nota!
Los olores que odian los gatos
Olores cítricos
Los gatos no son fanáticos de las limas, naranjas, limones y olores similares. De hecho, existen repelentes de gato que contienen esencias como estas. Tampoco aprecian mucho el sabor, así que es muy posible que se mantengan alejados de la zona donde vean que hay mucho de estos elementos.
Plátano
Entre los olores que no les gustan a los gatos, también está el plátano. Los felinos no se consideran amigos de esta fruta. Si quieres evitar que tu gato duerma una siesta y deje sus pelos en ese lugar de la casa, frota por fuera una cascara de plátano o déjala por un día. Verás como no se vuelve a acercar a esa zona.
Pescado en mal estado
Entre los olores que odian los gatos está el pescado en mal estado. Los felinos odian todo lo que esté caducado. Nunca intentes darle un pescado pasado a tu mascota pues no solo no lo comerá y, sino que si lo obligas seguramente enfermará.
Pimienta
Otro de los olores que odian los gatos es la pimienta. Los felinos no aprecian los olores de alimentos que son picantes o demasiado condimentados. De esta manera, cuando se encuentra cerca de la pimienta, independientemente del tipo que sea, su olfato los percibe como si fueran tóxicos.
Arena sucia
Una caja de arena sucia podría llevar a que tu gato se enfade contigo y a modo de regaño haga su propia en una alfombra costosa, en la maceta de alguna planta exótica y hasta en una ropa que ha caído en el suelo.
Pino
Aunque existen arenas naturales que están hechas con este tipo de material no debes abusar de la intensidad del olor, y que lleve al felino a tener un efecto contrario, al punto de odiar y rechazar la arena. Puedes rotar los olores de las arenas y que estos sean más neutrales, así tu gato no se saturará de ellos.
Cabe mencionar que los gatos también odian otros tipos de productos que tenemos en casa, como los jabones y desodorantes. Asimismo, existen algunas plantas que emanan olor que un felino no puede ni oler. Lavanda, geranio, tomillo, limón son algunas de las plantas que se encuentran en su lista negra. Finalmente, el eucalipto: la mayoría de los gatos les resulta tóxico este aroma.
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